R. r. 4: Caput corporum

((((...)))) Teoría onda-corpúsculo, luz, partícula, entorno de cuatro dimensiones, espacio de n-dimensiones, trillones, cuchillo, tercera ley de Newton, densidad, abrir mente/ Pantalla, ordenador, TV, estado paralizante, ritmo frenético, soporífero, aterrador/ Conectar, desconectar, trabajo, reír, llorar, descansar, relajarse, moscas anestesiadas, shaked, tantra, tensión, descarga/ Amor, descubrir, persona, cuerpo, desinflar, indiferente, repulsivo, puerta/ Consultorio sexual, Dr. Rebis, chicos, piruleta, desilusión, depresión/ Rodillas, piernas, juerga, masoca/ Desconocido-a, atractivo-a, pelo, ojos, expresión, mirar, sensación dolorosa, agradable, sortilegio/ Contemplar, cielo azul, luz, calor del sol, brisa, feliz/ Paradoja, Zenón, liebre, tortuga, correr, atrapar, tocar, escena real, metáfora, encuentro fortuito/

9 comentarios:

Red Sheep dijo...

Yo no veo ninguna paradoja en La Teoría Onda-Corpúsculo, la verdad, será por deformación formacional. La luz a veces se comporta como onda, a veces como partícula (el fotón). Es simple. No estamos hartos de escuchar (y decir) que no todo es blanco o negro? Pues es lo mismo.

Si no abrimos un poco la mente, no podremos entender un entorno de cuatro dimensiones, siendo la cuarta el tiempo. Bien, vale, esto lo entiende mucha gente. ¿Sois capaces también de imaginar un espacio de n dimensiones? Pues existe, aunque sea como modelo. ¿Somos capaces de imaginar una cifra de trillones? No, no podemos. Sin embargo hay fortunas trillonarias. ¿Un cuchillo muy afilado corta? ¿Un punzón muy puntiagudo pincha? Pues depende de la fuerza que le apliques (tercera ley de Newton). ¿Una bola de hierro puede flotar en agua? Pues sí, sólo tienes que calcularle el diámetro adecuado (cuestión de densidades, no más).

¿Y esto a qué viene? Pues ni idea, pero se trataba de abrir la mente, ¿no? ☺

Pesadillas con cuerpo dijo...

Relativo a la entrada 5 "Frente a la pantalla del televisor o del ordenador....". Cierto lo que se cuenta sobre la sensación ante la pantalla del ordenador o la TV: ese estado paralizante pero a punto de estallar... ese nerviosismo indescriptible... ese ritmo frenético y soporífero a la vez ante la pantalla. Aterrador, sin duda...

roger cen6 dijo...

No sé si ponerme a reír o a llorar. Después de pasarnos todo el día trabajando, buscando trabajo o no se sabe muy bien qué, como es mi caso, todos corremos a casa con prisas para sentarnos delante de la televisión o el ordenador ¡para descansar y relajarnos un rato! Es de chiste. Esto de conectarse para "desconectar" es lo más bueno que se ha inventado desde masticar chicle. Lo más divertido es que acabo con tal estado de nervios después de "relajarme", que al meterme en la cama no paro de dar botes y no hay quien pegue ojo. Las moscas anestesiadas no sé, pero yo ¡sí que estoy shaked y bien shaked! Me consuela que alcanzo una especie de ""tantra"" eléctrico, tensión por todas partes, ¡sin descargar ni una sola vez!¡qué martirio!

Snereva FG dijo...

Soy un poco desordenada, diría que bastante la verdad, y voy saltando y mirando lo que me parece curioso. Me he fijado en la entrada I, la del amor. Creo que sí, que enamorarse. Sí, enamorarse es posible. Sigo, digo que enamorarse, sí, nos hace descubrir a otra persona y con ella a nosotros mismos, incluido el cuerpo. La mala pasada es que cuando se acaba todo se desinfla y pierde su encanto. Todo. Sí, incluido el cuerpo. Que se convierte en una masa de carne indiferente, casi repulsiva. Ya sabéis de qué hablo si estáis tan aburridos como yo. En fin, el amor ya volverá a llamar a la puerta. TOC TOC.

ellanove dijo...

que bien, escuchen, no sabía que esto también era un consultorio sexual, Dr. Rebis.. comparto la idea del experto en corporum VIII. ¿o experta? Concluyendo, los chicos, aquí y en todas partes, son un poco limitados y creen que todo va girandito alrededor de su piruleta..No vamos a desilusionarlos, que después se deprimen, los pobrecitos, y todavía es peor...

lobo_ferox dijo...

Diablos, es jodidamente alegre romperse las rodillas pisando piedras?? Vaya juerga ¡¡qué masoca compadre!!

Cube dijo...

Respecto a la entrada XI: Sí, ya sé. Vas por la calle o estás en algún otro lugar y ves a un/a desconocido/a que te parece tremendamente atractivo/a o, mejor dicho, tu le prestas todas esas cualidades de las que ni eras consciente que te resultaban atractivas (la forma del pelo, la disposición de los ojos en la cara, su expresión, etc.).

Pero no te atreves ni a mirar, porque cada vez que miras, la sensación crece. Finalmente, el/la desconocido/a pasa de largo y deja una sensación dolorosa (porqué no lo/a tendrás nunca y, aunque así fuera, se rompería pronto el sortilegio) y agradable a la vez.

Cube dijo...

Respecto a la entrada IX: Y contemplar el cielo azul sobre nosotros, en toda su variedad de tonos. Y sentir la luz y el calor del sol.

El cielo azul, el sol y la brisa ¿qué más se necesita para ser feliz?

gentle mind dijo...

También sobre la entrada XI. Tal como está contada la historia, podría compararse con la paradoja de Zenón de la liebre y la tortuga, por mucho que corra no la atrapará. Disfrutará del placer de verla más o menos cerca sin poder jamás alcanzarla ni mucho menos tocarla. Habría que estudiar si la escena real es la metáfora de la paradoja o a la inversa, la paradoja filosófica ilustra el encuentro fortuito.

Sea como sea, Zenón seguirá ahí durante siglos y el/la desconocido/a también. Suerte a los dos.

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